martes, 1 de septiembre de 2015

No te pierdas...

No te pierdas en la superficialidad del mundo. En los estereotipos de la gente, en el deleite de lo efímero. En la mentira de lo vano.                                                               
La belleza de la gente se nota en su mirada, en la forma en que se expresa, pero sobretodo en su manera de actuar.                                                                                      
No te vayas por lo primero que veas; busca adentro, en donde se alojan las cosas que más valen en la vida. Aquellas que no se pueden comprar con dinero. Aquellas que hacen de las cosas simples, algo extraordinario. 

No te pierdas en lo absurdo, en lo que no lleva a ninguna parte. 
No te aferres al pasado, a lo que por alguna razón ya quedó atrás. Si algo pasó por tu vida y hoy no está, significa que su tiempo y propósito ya fue, aunque no lo entiendas aún. Poco a poco cada pieza encaja en su lugar.

No te pierdas en tristezas necias, en momentos que hace tiempo se debieron superar. Cada etapa de la vida es un aprendizaje, no te quedes estacionado en la vida, porque todo en ella debe continuar.

No te pierdas de la vida, intentando sobrevivir sin disfrutarlo. 
No renuncies al presente, buscando un futuro que quién sabe si llegará. Mejor haz de cada instante una aventura, de cada abrir y cerrar de ojos una ilusión. Mira con esperanza tu vida, y no te pierdas en preguntas que solo el tiempo, en su debido momento contestará.